la lluvia nunca vuelve hacia arriba

En el verano de 2013 tuve la suerte de realizar un taller internacional de arquitectura amurallada en Cartagena de Indias, Colombia, ya habéis podido ver algunas de las fotografías que he compartido en este mismo blog.
Durante una de las semanas del taller trabajamos sobre el concepto de las "Derivas".

¿Qué es una deriva?

La deriva es un concepto propuesto por los situacionistas que, en términos generales, significa pasear o caminar sin ningún objetivo específico. 
Hasta ahí todo está bastante claro, pero , ¿cómo usar este concepto en la arquitectura, en el conocimiento del lugar, del contexto?

Mapa situacionista por Constant Nieuwenhuys

Realmente lo que quiere es establecer una reflexión sobre las formas de ver y experimentar la vida urbana, siguiendo las emociones y situaciones urbanas que se plantean a lo largo del recorrido.

De esta forma, por ejemplo, podríamos considerar una deriva del rojo. Me explico, realizar un recorrido por el entorno a estudiar siguiendo todos aquellos elementos de rojo que aparezcan en nuestro camino. De esta forma, no tenemos un recorrido establecido, sino que nos dejamos llevar por una premisa que será la que haga que conozcamos ese lugar de una forma distinta a sí lo hiciéramos, por ejemplo , siguiendo el verde.

Nuestro grupo de trabajo, el Grupo 19, formado por Juliana Marroquín (Colombia), Arturo Dargence (México), Hugo Portugal (Ecuador) y María Murillo (España), tenía la labor de realizar una deriva sobre la ciudad de Cartagena, vinculada a una idea de proyecto.
Es entonces cuando surge la idea de que "la lluvia nunca vuelve hacia arriba", siguiendo el título de la canción de Pedro Guerra.

En el vídeo superior podéis ver la deriva que realizamos para nuestra propuesta en la que pretendíamos mostrar una realidad de la ciudad de Cartagena donde el plano horizontal cobra importancia sobre el vertical, donde no hay apenas árboles en la calle, sino que todo se plantea a través de las enredaderas en balcones, donde la vegetación es privada, pero las puertas de las casas siempre están abiertas.

Desde siempre he sido una persona obsesionada con el pavimento de las ciudades, siempre que viajo me gusta observarlo y compararlo con el de la ciudad anterior y es de destacar que en este vídeo no tiene ninguna importancia el plano del suelo, solo se enfoca hacia arriba, hacia donde la ciudad de Cartagena no vuelve la mirada. En el vídeo podréis ver la enorme diferencia de escala que hay dentro de la misma ciudad de Cartagena, era una de las principales ideas que queríamos recoger en la deriva.

Catedral de Cádiz, littlewall

Pues resulta, que está mañana he hecho una visita a Cádiz, una de las ciudades más bonitas que tiene nuestro país, y no es porque sea una ciudad vecina, sino porque tiene un innegable valor tanto histórico como patrimonial.

Y paseando por Cádiz, he vuelto a mirar al suelo, como de costumbre, y he visto algo que muchas veces ha pasado desapercibido para mí, y es la solería dispuesta en la plaza de la Catedral. Siempre que llegaba miraba hacia arriba, hacia ese imponente frontón de concha, pero no me había parado a mirar al suelo. No en Cádiz, estaba demasiado engatusada por su catedral.

Catedral de Cadiz, solería, littlewall

Tras ver semejante detalle, no pude quedarme quita y me dirigí hacia Google earth, ya que la plaza está parcialmente ocupada y no era capaz de asegurar lo que ya sospechaba. Cádiz nos muestra la planta de su catedral a menor escala, justo delante de nuestras narices, en su pavimentación.

Catedral de Cadiz, solería, littlewall

enlaces de interés:

                           teoría de la deriva

littlewall